Este ejemplar lo compré en el vivero, de lo que había quedado de la campaña de navidad.
La verdad es que ofrece muchos trabajos a realizar, muy ramificado y denso. Así que lo primero que hice fue limpiar acículas viejas, para que esté el árbol aireado y saludable.
Cuando se acerque la fecha del trasplante, eliminaré algunas ramas, ya que la primera rama se divide en tres y quiero dejar una única, buscando alternar un poco la ramificación y disponerlo correctamente.
10/03/2016 Realizado el trasplante, tenía las raíces en buenas condiciones, pero la tierra en la que venía se encontraba muy apelmazada, por lo que tuve que estar un buen rato palilleando para soltar un poco el pan de raíces.
En las coníferas suelo añadir micorrizas en polvo en el montóncito de sustrato donde establezco el cepellón. Algunas personas sostienen que no son necesarias y otras que sí, igualmente hay gente que comenta que con dejar un poco de la tierra vieja ya es suficiente. Yo, para no arriesgarme, prefiero echar un poco y así estoy más tranquilo.
Como ya comenté antes, iba a hacer una selección de ramas, quitando las que definitivamente no quiero en el diseño. Al ser ramas gruesas les puse una especie de torniquete de alambre y pasta cicatrizante.
Cuando se recupere del trasplante, alambraré de nuevo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario